Parece mentira como cambia el reloj biológico de repente : la primavera llega y nos convertimos en lagartos ávidos de sol ... Me encanta todo pero el olor especialmente : huelo con la misma fruición que lo hago un frío día de invierno soleadoy con el aire tan puro que puedo ver desde mi casa los lejanos Ancares.
Realmente qué haríamos sin el sol y los cambios que produce en nosotros ?????
Reflexiones de un padre blogguero que encontró en este mundo una válvula de escape a sus múltilple paranoias
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